PREGÓN SEMANA SANTA AÑO 2007
Nuestro Socio de Honor Don Abel Moreno Gómez, fue designado pregonero de la Semana Santa de Zaragoza en el año 2007. Acompañamos este Especial que reproduce los textos impresos por la organizadora. La Cofradía de La Humildad, así como algunos datos biográficos y una pequeña galería fotográfica del acto.
Me piden que presente a don Abel Moreno Gomez, ilustre Pregonero de la Semana Santa de Zaragoza en el año 2007, y yo me dispongo presto a hacerlo. Un poco después, al sentarme para comenzar a escribir, me planteo qué presentación puedo hacer de Abel. No quiero redactar un texto biográfico, pues son varios los que se han publicado en diferentes medios en los últimos años, además de los que circulan por Internet. Tampoco quiero centrarme en su faceta militar. Ni siquiera quiero entrar muy a fondo en su “enorme” carrera musical. En 2005, lo presenté por vez primera en el Concierto del Auditorio; en ese mismo año, poco después, me tocó hacerlo de nuevo en la presentación del CD que se realizó en la Caja Inmaculada. Pero entonces todavía conocía sólo al personaje. Ya el año pasado tuve la oportunidad de volver a presentarlo en el concierto que, organizado por la Asociación para el Estudio de la Semana Santa, se dio en San Cayetano, esa iglesia tan próxima al mundo cofrade que llega a confundirse con la Semana Santa de Zaragoza; ese concierto lo daba la Banda de Villanueva, esa Banda tan íntimamente ligada y casi indisolublemente unida a la Hermandad que hoy me hace el encargo de esta nueva presentación, La Hermandad y Cofradía de Nazarenos de Nuestro Señor Jesús de la Humildad entregado por el Sanedrín y de Maria Santísima del Dulce Nombre que, por delegación de la Junta Coordinadora de Cofradías de Zaragoza, es la organizadora del Pregón de la Semana Santa en este año de 2007 y, por lo tanto, la que ha propuesto al Pregonero. Cuando preparaba la presentación del pasado año e iba enumerando todas las facetas y meritos que hacen de Abel el gran personaje que es, me di cuenta, casi al terminar el texto, de que en realidad no era eso lo mas importante, sino la persona que se mueve tras ese insigne músico y gran compositor musical que es Abel Moreno, tras ese infatigable trabajador capaz de haber compuesto una obra de tal volumen y calidad como la suya. Me impresiona, si, el personaje, pero yo estoy convencido de que los que tenemos la suerte de conocer a la persona nos llevamos lo mejor de el: él mismo. Recuerdo los nervios de cuando lo conocí tras una laboriosa y elaborada cita, allá por 2004. Las personas que lo buscábamos para conseguir la composición de una marcha estábamos entre ilusionadas por conocerlo y temerosas de no poder lograr nuestro objetivo. Hoy estoy convencido de el propio Abel era el que mas claro lo tenia, el que acudía a darnos lo que aun no le habíamos pedido: una marcha para la Semana Santa de Zaragoza; y, pasado algún tiempo, lo que ni siquiera nos habíamos atrevido a soñar: su concierto de Semana Santa en el Auditorio, su presencia cada vez mas frecuente entre nosotros y, sobre todo, su amistad. También recuerdo un viaje a Sevilla, esperando la salida de la Procesión de Coronación de la Virgen de Montesión – en la que, por cierto, se estrenaba marcha de Abel Moreno- con un grupo de amigos, entre ellos el desaparecido y añorado Juan de Padura, cuando Abel hizo que nos acercáramos a él para comentarnos el estreno de la marcha Semana Santa en Zaragoza. “Comienza con las bocinas del Pilar, el Bendita y Alabada”, nos decía antes de tararear algunas notas. Cierto tiempo después, tras su estreno en concierto y a través del móvil, le pude poner en directo su Semana Santa en Zaragoza, desde la calle Doctor Palomar, en la salida de la Cofradía de La Humildad, procesión en la que hace dos años se estrenó su marcha en la calle y en donde el año pasado, antes de estar siquiera pensada su propuesta como Pregonero, asistió en persona a escuchar su marcha y acompañar a la Cofradía en su Estación de Penitencia a la Santa Iglesia Catedral. Yo creo que Abel conquistó a la Zaragoza cofradiera el día del concierto en el Auditorio, pero no sólo por su música. Cada vez que escucho de nuevo sus palabras de presentación de las marchas que allí se interpretaron, me doy cuenta de que se nos metió en el bolsillo, y eso al exigente publico zaragozano; vuelvo a descubrir como ese día compartió con nosotros toda la Zaragoza y la Semana Santa que lleva dentro, y no dudéis que es mucha. Compartió con todos nosotros algunos de sus mas íntimos y guardados sentimientos de la juventud vivida en nuestra ciudad, incluidas referencias familiares, su noviazgo con Mamen, su “magallonera” esposa, e incluso su boda en El Pilar. Aquel día dejó de ser para algunos que todavía se resistían a ello “ese músico andaluz” para pasar a ser Abel Moreno, “el del concierto”, “el de Semana Santa en Zaragoza” Así es Abel. Hoy ya puedo desvelar su laboriosa preparación del Pregón, su afán por documentarse, sus esquemas para intentar condensar en él todos los actos y salidas procesionales de nuestra ciudad. También puedo deciros que antes de llegar la pasada Navidad, “cuando aun el Señor no había nacido”, el ya tenia preparado, a falta de pequeños matices, el texto que acompaña y da sentido a estas líneas de presentación y que anuncia a Zaragoza que por sus calles se va a rememorar, un año mas, la Pasión y muerte de Cristo hecho hombre, paso previo a la Gloriosa Resurrección. Gracias, Abel, por habernos ayudado a perder el respetuoso miedo que puede llegar a transmitir tu personaje; gracias por permitirnos disfrutar con respeto de la cercanía y amistad de tu persona. Tuya es la palabra, tuyo es el atril y éste es tu pregón.
Muchas gracias, Pregonero.
Ricardo Navarro González Secretario de la Asociación para el Estudio de la Semana Santa
PREGÓN DE LA SEMANA SANTA DE ZARAGOZA AÑO 2007 Ay, Señora, quien pudiera ser costalero en tu paso y tener la alegría inmensa de ser Pilar bajo tu manto.
Antes de iniciar este pregón, con los nervios propios y las dudas lógicas que un compositor, que no orador, tiene por la responsabilidad contraída, ya que mis palabras van dirigidas al alma de Zaragoza, quiero agradecer a la Cofradía de la Humildad y a la Junta Coordinadora la confianza puesta en mí. Cuando el Hermano Mayor de la Cofradía de la Humildad, D. Luis Pellicer, me ofreció la posibilidad de tener el honor de ser pregonero de la Semana Santa de Zaragoza, tuve una inmensa alegría, pero a la vez me inundó un mar de dudas, ya que siendo yo una persona que derrama las notas con más o menos fortuna sobre los pentagramas, pienso que no voy a ser capaz de hacer lo mismo con las letras sobre el papel para poder transmitirles y pregonar todo lo que es y significa la Semana Santa de Zaragoza Me pongo, pues, en vuestras manos y en las de la Virgen del Pilar, y os pido que escuchéis este pregón con los mismos oídos benevolentes con que escuchasteis en el año 2005 el estreno de “Semana Santa en Zaragoza”, ya que aquélla y éste han salido del mismo corazón, de la misma pluma y de la misma mano. La buena acogida recibida por dicha composición es lo que me ha decidido a aceptar el honor de ser vuestro pregonero, a sabiendas de que al terminar el mismo alguien pueda con razón comentar: ¡zapatero a tus zapatos! En una reciente visita a Polonia, organizada por la Asociación para el Estudio de la Semana Santa de Zaragoza, con D. José García Alfonso como infatigable presidente al frente, nos comentaban que allí no se celebra la Pasión de Cristo, sino solamente la Pascua de Resurrección. Nosotros, sin embargo, como dijera un día Su Eminencia el Cardenal Amigo Vallejo, tenemos la especial cualidad de conmemorar todos los años la celebración del gran Misterio de la Muerte y Resurrección de Jesucristo y, al mismo tiempo, la novedad irrepetible de una memoria que se vive intensamente desde una fe religiosa. No es pues una historia del pasado, sino la vida del Misterio de la Redención que, más allá de los siglos, afecta de tal manera al creyente que no sólo recuerda los acontecimientos que ocurrieron un día y en un lugar, sino que hace memoria personal y comunitaria del gran Misterio de la Salvación. Por otra parte, desde las celebraciones litúrgicas a las manifestaciones populares, todo queda envuelto en esa permanente novedad del Misterio que se representa en acciones, imágenes, sonidos y símbolos que se viven con la presencia Pascual de Jesucristo. Naturalmente que cada pueblo, comarca o país tienen una singular manera de celebrar este gran Misterio. Y Zaragoza ha sabido hacerlo de una manera tan singular y propia, que no en vano su Semana Santa ha sido declarada Fiesta de Interés Turístico Nacional. La Semana Santa de Zaragoza descansa sobre los sólidos pilares de la fe, la religiosidad y la tradición. Las procesiones que recorren nuestras calles son manifestaciones de una misma religiosidad que ha creado una expresión popular, colectiva y estética de gran altura artística. Qué gran ejemplo ver el orden de nuestros cortejos procesionales con sus pasos, atributos, hachas, cofrades y hermanas de mantilla, o esos componentes de una banda o una agrupación de tambores y bombos interpretando esas marchas o toques, piezas ensayadas en el anonimato durante la mayor parte del año, con frío, con calor, privándose del tiempo libre, sin otra compensación que acompañar a sus Titulares en su Estación de Penitencia. Tambores y bombos afirman que disfrutan en los ensayos con el aprendizaje de nuevas marchas y confraternización en los descansos.
Dicen que los primeros días son más duros por el frío que se pasa en ellos, pero pronto en la procesión verán coronado su esfuerzo
El sonido de los tambores, trompetas y bombos parece el lamento del alma del zaragozano. Es este sonido el que vuelve a traernos otra Semana Santa, no el calendario ni el reloj.
Este Sábado de Pasión a la Plaza del Pilar cornetas, tambores y bombos al Pregón nos han convocado.
La historia nos dice y recuerda que hace 200 años en el aire de Zaragoza por otro motivo sonaron.
Pero estamos en 2007, preludio de una gran “Expo”, Zaragoza mira al futuro ya que es pasado aquel tiempo.
Por eso, mañana, Domingo, cuando suenen los instrumentos, Dios bajará a Zaragoza para sentirse en el Cielo.
Y también mañana, Domingo de Ramos, cuando se abra la puerta de Santa Isabel para dar salida al estandarte de la Cofradía de la Entrada de Jesús en Jerusalén, será como la versión zaragozana de la apertura de las puertas de San Pedro, dando así esta Hermandad cumplimiento a la Escritura.
SEMANA SANTA Para unos, fiesta; para otros, turismo y vacaciones. Pero para la inmensa mayoría, con sus Hermandades y Cofradías, es conexión en la ciudad entre sus barrios.
DOMINGO DE RAMOS Parroquia de la Coronación, Barrio de San Gregorio, Convento de las Madres Agustinas, Colegio Pompiliano, Madres Dominicas, San Felipe, San Pablo y San Miguel. Día luminoso donde los haya, lleno de palmas y olivos, caramelos hechos de figuritas, vemos niños con sus padres y otros con sus abuelos. Todos vamos a San Cayetano, ya que allí es el comienzo.
Jesús en Jerusalén de palmas va rodeado y suenan tambores y carracas allá por San Cayetano.
Agonía, Rosario, Silencio, Prendimiento, los Dolores y Esclavas de María Santísima, celebran Vía Crucis en San Pablo.
También el Domingo de Ramos, en la calle Doctor Palomar, un niño viendo a Jesús por el Sanedrín entregado, al ver salir la Cruz de Guía dice a su padre extrañado: ¡Mira, ahí está el Crucifijo que de mi colegio han quitado!
Y allá por la antigua Universidad, los costaleros a la voz de ¡a ésta es! levantarán la Virgen del Dulce Nombre e irán al cielo con Ella una y otra vez. Y volverá de madrugada sin sol pero con alegría, y no vendrá con cansancio, pero sí con soberanía.
LUNES SANTO Pasión en San Gil, San Miguel, Santa Gema y Santa Engracia, y en Miguel Servet, allá por el bajo Aragón, barrio de mi juventud.
Contemplaremos al Nazareno antes de que termine el día, ante el que se llevará a cabo la Conversión de Santa María.
MARTES SANTO Pasión en Jesús Maestro, Colegio del Salvador, Hermandad del Refugio, Colegio de la Salle, Nuestra Señora del Portillo y Nuestra Señora del Carmen. Día de Lágrimas y Estaciones.
Mirando Nuestra Señora de la Cruz el Descendimiento, sus lágrimas va derramando con pena y con desconsuelo.
En la Iglesia del Portillo ora Jesús en el Huerto donde Agustina de Aragón encendió el alma del pueblo.
MIÉRCOLES SANTO Pasión en San Antonio, San Felipe, Santa Engracia, Santa Isabel y Altabás. Convento de las Madres Agustinas y Parroquia de la Coronación. Día de la Procesión del Encuentro.
En la parroquia de San Felipe la Humillación es un hecho y a la Virgen de la Amargura clavan puñal en su pecho.
Jesús Camino del Calvario desde Santa Engracia va al Encuentro, que la Virgen de los Dolores en el Pilar llora con desconsuelo.
Matracas se oyen de lejos desde la plaza del Pilar. Son Angustias y Ecce Homo que vienen del Arrabal.
JUEVES SANTO Pasión en San Antonio, Santa Gema y San Felipe. Nuestra Señora del Carmen, Colegio de las Madres Escolapias, Convento de Jerusalén e Iglesia de San Pablo. Colegio de los Padres Agustinos, Iglesia de Santa Isabel y Catedral de la Seo. Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, Parroquia de La Coronación y Santiago el Mayor. Día de Predicación, toque de cornetas y jotas. Acto del Silencio, Plática y Sermón del Descendimiento.
La Exaltación de la Santa Cruz, antes desde Casablanca, ahora tambores la escoltan desde la Real Maestranza.
Y la Crucifixión del Señor es llevada a cabo de la iglesia de San Antonio a la de San Cayetano.
Cristo se abraza a la Cruz en presencia de la Verónica allá por la puerta del Carmen, resto de una ciudad heroica.
En la plaza de Sinués toque de corneta oiremos y en honor de Cristo y la Verónica jotas subirán al cielo.
Por el paseo de Ruiseñores, ya con la tarde muriendo, ante el Dolor de su Madre a Nuestro Señor van Prendiendo.
De nuevo desde San Pablo heráldicas enlutan el cielo, y Zaragoza entera declama Silencio, Silencio, Silencio.
Suenan de nuevo tambores en su segundo traslado, ya que Jesús en La Seo de Espinas es Coronado.
A la misma hora en la Avenida de Goya se instituye la Sagrada Eucaristía poniendo en todo el barrio un sueño de Ave María.
Nuestra Señora de la Asunción ve llegando Jesús al Calvario y todo el barrio Oliver al Gólgota va caminando.
Con Mayor Dolor y Fraternidad a la Columna es atado, y en la Plaza del Pilar la Plática hemos escuchado.
MADRUGADA Iglesia de Santa Isabel e Iglesia de San Nicolás.
Doce en punto de la noche, Zaragoza, madrugada, sale de Santa Isabel una imagen esperada.
Lleva en su regazo al Verbo, de La Piedad es Señora y en su segunda salida hasta San Nicolás llora.
VIERNES SANTO Siete Palabras. Hermandad de La Sangre. Día del Santo Entierro. Única procesión de España que recoge cronológicamente todos los Misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo.
En la Plaza del Pilar tambores y bombos batiendo que con Las Siete Palabras todo está bien dicho y hecho.
Zaragoza está en la calle, Procesión del Santo Entierro, con sus Vírgenes y Cristos, sus santos y monumentos.
Hermandad de la Preciosísima Sangre, Procesión del Santo Entierro, cuya historia antiquísima se pierde allá por los tiempos.
Las familias zaragozanas, hijos, padres y abuelos, con cirios, tambores o bombos, algunos con sangre en los dedos.
Tocan todos por la paz dentro y fuera de nuestro suelo, por la mujer maltratada, por los ancianos y enfermos.
Piden a Dios por Zaragoza, piden a Dios por Aragón, y por la nueva España unida de la mutua comprensión.
SÁBADO SANTO Iglesia de Santa Isabel, San Pablo y Palacio Arzobispal. Acto de la Soledad de la Virgen, Dolores ante el Santo Sepulcro y Vigilia Pascual.
Dolores desde Santa Isabel, Esclavas desde San Pablo, acto de la Soledad de la Virgen, ya todo ha finalizado.
DOMINGO DE RESURRECCIÓN Colegio de los Padres Agustinos. Día del Encuentro Glorioso
Y ya sólo falta Esperanza y Consuelo en día tan jubiloso, donde Jesús Resucitado va a su Encuentro Glorioso.
En estos momentos vienen a mi memoria los recuerdos de mis años juveniles en la Semana Santa de Zaragoza, ya que, formando parte de la Banda de Música de la Academia General Militar y bajo la batuta del maestro Pedro Raventós, estuve presente en ella durante muchos años. También mi recuerdo para la Banda del Regimiento Las Navas, del cuartel de los Leones bajo el mando del maestro Víctor Bueno. Y también recuerdo, cómo no, la Banda de Música primero del Hospicio y después de la Diputación, con los maestros Borobia y Victorino Bell. Y si importantes han sido las bandas y los directores zaragozanos, no menos lo han sido sus compositores como, por ejemplo, los bilbilitanos Ernesto y Pascual Marquina. Este último regaló a Sevilla una excelente composición para su Semana Santa: “Procesión de Semana Santa en Sevilla”. Lo que me llevó a componer en justa compensación para toda la familia cofrade zaragozana mi ya aludida “Semana Santa en Zaragoza”. Y antes de que este pregón entre en los compases del silencio y se escuchen las ultimas palabras de su partitura, quiero terminar con una anécdota, producto de mis largos años al frente de mi Banda Militar, tras los pasos en Semana Santa: Como todo el mundo quiere ir lo más cerca posible de su Virgen, el sitio más indicado es al lado del director de la Banda, ya que ésta va inmediatamente a continuación del paso de la Imagen. Allí se solían colocar algunas señoras que no es que molestaran, ni mucho menos, pero sí afeaban un poco el desfile de una Unidad Militar uniformada. Si el tiempo no se extendía, nada se les decía, pero si perseveraban en esta situación, yo solía llamar a mi segundo y le decía: “¡Teniente, traiga ese tambor que tenemos para señoras, que ésta está dispuesta a tocarlo!”, lo que al oírlo indefectiblemente hacía que dicha señora se alejara con prontitud de entre los músicos de la banda. Pero supongo que si ese caso se hubiese dado con una señora de Zaragoza, al llamar yo al Teniente y requerirle el tambor, esta señora con toda seguridad de esta manera habría contestado:
Pues mire, ahora que lo dice pensándolo estaba yo, tráigalo sin más tardar que le voy a demostrar con que pericia y maestría, llena de cariño y amor, en nuestra Semana Santa le tocamos el tambor las mujeres de Zaragoza a la Virgen y al Señor.
Muchas gracias, Zaragoza, por el honor concedido. Gracias también a la Virgen, por inspirar cuanto he dicho.
A Ti, Santísimo Cristo de La Cama, al que acompañé tanto tiempo, en esta plaza de la Virgen una composición yo prometo.
Ay, Señora, quien pudiera ser costalero en tu paso y tener la alegría inmensa de ser Pilar bajo tu manto.
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GALERÍA FOTOGRÁFICA
(Pinchar en las imágenes para ampliarlas)
(Fotografías de nuestro asociado Oscar Puigdevall)
Entrevista realizada al pregonero en Popular TV